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Argentina: Vergonzoso, preservativos en primaria

Educar desde niño a una persona en el “haz lo que quieras, pero cuídate” se utiliza una pedagogía del horror: horror al sida, al embarazo, a las enfermedades de transmisión sexual, donde el otro es visto como un potencial agresor.

REDACCIÓN HO / AA.-  Hoy en día asistimos a un número creciente de iniciativas descabelladas en materia de educación sexual. Pareciera que hay una auténtica obsesión por convertir a los alumnos en animalitos atados a todo tipo de prácticas sexuales desde su primera pre adolescencia. “Pásalo bien y no mirés con quien”, parece ser el lema de moda. Es el ataque de la que algunos expertos en comunicación denominan “la izquierda pélvica”, obsesionada en reducir al hombre al nivel meramente biológico, en un estado dominado ciegamente por las hormonas. Se olvidan, sin embargo, que además de hormonas, el ser humano también tiene neuronas. Tal es el caso del proyecto presentado por la diputada María José Libertino.

La diputada Libertino

La diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, María José Libertino es ex directora del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi). Realiza un gran activismo por la despenalización del aborto en Argentina. Es una de las firmantes que apareció en varios diarios bajo el lema de “Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”. Recientemente cobró notoriedad cuando twitteó a todos sus seguidores (en lugar de su asesor) para manipular a dos mujeres con hijos moribundos para que fueran funcionales a su proyecto de eutanasia. De esto la web ‘Argentinos alerta’ informó en los siguientes enlaces:

Por error, una diputada twitteó que quería manipular a dos mujeres que pedían por sus hijos moribundos
Listado de legisladores y partidos políticos a favor del aborto. ¡No los votes!

El proyecto

La legisladora kirchnerista, María José Libertino, va a presentar un proyecto de ley a la Legislatura porteña que busca que se garantice la accesibilidad para los alumnos de los dos últimos años de las escuelas primarias y las secundarias de la Capital Federal de preservativos. La propuesta se denomina «Accesibilidad de los Preservativos en el Ámbito Escolar».

Lubertino sostiene que la edad de inicio sexual es cada vez más baja y así se evitarían embarazos adolescentes y otros problemas (según esa peculiar visión reduccionista de la persona). El objetivo es que «los preservativos estén accesibles en los lugares donde ellos están; que haya un dispensar, una caja o canastita con preservativos en algún lugar de la escuela, sin ningún tipo de obligatoriedad para que alguien pueda tomar uno sin ser juzgado y sin ser mal visto».

“Si bien la Ley 418, de Salud Sexual y Procreación Responsable, estableció la gratuidad en la entrega de profilácticos, la distribución se encuentra en centros de salud y hospitales, y en general los adolescentes no se acercan a esos lugares”, señaló Lubertino.

La iniciativa que propone abarca a los chicos de entre 11 y 13 años, edades que coinciden con el sexto y séptimo grado de la escuela primaria. Según explicó, el alcance sería tanto para escuelas públicas y privadas. También afirmó que todo esto debería ser parte de una educación sexual integradora en las escuelas del país.

Según establece el proyecto, la entrega de los profilácticos estará acompañada por el suministro a los alumnos de un instructivo que contenga información sobre «su adecuado uso y sobre prevención de embarazo y enfermedades de transmisión sexual».

El análisis de Argentinos Alerta

1) El mito del sexo seguro. Recodemos una vez más que cuando se saca a la sexualidad del marco del amor y del compromiso entre dos personas, aquello del “sexo seguro” no es más que un mito. Cuando se reduce a la sexualidad a una mera cuestión lúdica, deportiva, de “touch and go”, puramente hedonística, no hay posibilidad de sexo seguro. No se trata de no hablar de sexo, sino de poner a la sexualidad en el marco adecuado.

No está demostrado que la distribución masiva de preservativos disminuyan los embarazos adolescentes ni las enfermedades de transmisión sexual ni tampoco las infecciones de VIH/SIDA. Sobre estas problemáticas Argentinos Alerta ha elaborado recientemente estudios bien documentados:

Informe especial: 30 años de SIDA

Informe especial: Tendencias en el uso de métodos contraceptivos y la «interrupción voluntaria del embarazo»
El sexo oral supera al tabaco como causa de cáncer de garganta

La cultura anticonceptiva proporciona un sentimiento de falsa seguridad que induce a un aumento en la frecuencia de la actividad sexual. Como los preservativos tarde o temprano fallan, aumenta el número de embarazos no deseados. Finalmente, frente a esta situación se recurre al aborto. De esta forma, mientras mayor cantidad de gente pueda acceder a la anticoncepción, más fácilmente se les podrá vender luego el aborto. Primero, comienzan a buscar abortos ilegales y, luego, los mismos que promueven la anticoncepción, comienzan a pedir por la legalización del aborto.

Un aspecto importante que omiten los promotores del preservativo es que no previene completamente el contagio del virus del papiloma humano (VPH), ya que el virus se transmite por contacto de piel con piel de la zona ano genital, la misma que muchas veces queda fuera del área de protección del preservativo. La mayoría de los tipos de virus poseen en su membrana antígenos que son específicos para receptores de ciertos tejidos, que hacen que el VPH se aloje en la región genital, garganta y ano.

2) ¿Preservativos para niños?

Una educación sexual verdaderamente integral debe abarcar todas las dimensiones del ser humano: la biológica, la psicológica y la espiritual. En cambio, en proyectos como los de la diputada Lubertino se reduce al ser humano a lo meramente biológico. Se considera a los niños y adolescentes como meros “animalitos en celos” dominados por sus hormonas y a los que hay que “empastillar” y llenar de preservativos. Es una perspectiva sumamente deshumanizante.

La sexualidad reducida a “prevención de enfermedades” confunde al adolescente, quien empieza a creer que el amor es algo exclusivamente orgánico, reducido a actividad sexual con protección y esto lo incapacita para amar y ser amado verdaderamente. Una sexualidad disgregada del amor y reducida al mero placer es incapaz de generar vínculos estables entre las personas. “Compromiso” y “fidelidad” son palabras ausentes en esta visión. Cuando desde niño se va educando a una persona en el “hacé lo que quieras, pero cuidate” se está utilizando una verdadera pedagogía del horror: horror al sida, horror al embarazo, horror a las enfermedades de transmisión sexual, donde el otro es visto como un potencial agresor.

3) Una educación sexual auténticamente integral

Es aquella que pone a la persona humana en el centro (educación personalista) y le brinda todo aquello que necesita aprender (conocimiento y actitud) desde que nace y que le capacita para llevar una vida feliz con una pareja estable y permanente. Por eso, en última instancia, la educación sexual es educación para la vida familiar.

En una educación auténticamente “integral” se deben armonizar sentimientos y deseos, con inteligencia y voluntad para que la persona pueda tomar las mejores decisiones conformes a la naturaleza humana, aunque esto suponga esfuerzos. Esta educación no se agota en la transmisión de información. Debe estar orientada a la formación de actitudes positivas. Obviamente la información debe reflejar la verdad pero también la conducta de los educadores (padres, maestros, profesores, etc.) debe ser coherente para generar virtudes.

Insistimos, no se trata de no hablar de sexo, sino de poner al sexo en su marco adecuado, que es el del amor.

Diputada Lubertino: los niños y adolescentes tienen hormonas y también tienen neuronas. ¡No los subestime!

Written by Rafael de la Piedra