“Hay una tira de locos que piensan y actúan de manera diferente a todos los demás. Son fieles en sus matrimonios, no usan métodos anticonceptivos y tienen hijos como conejos por que dicen que son un regalo de dios, no sobornan, viven su celibato en castidad, ayunan, rezan, y mil cosas más que para mi están fuera de época y del adelanto del mundo de hoy”; eso dice mucha gente. Pero, ¿cómo no estar locos si se encuentra el porqué de hacerlo? En el mundo actual, sería una locura juntarse con una tira de pescadores ignorantes siendo descendiente de reyes, sería una idiotez proteger a una adultera, se tendría que ser poco inteligente para ir por todos lados hablando incoherencias como amar a tu enemigo, y la mayor muestra de demencia sería dejarse matar siendo inocente.

¿Porqué hacerlo? ¿Qué sentido tiene? Pues la respuesta es simple: Amor. Jesús viene al mundo por amor y se hace hombre para darnos un testimonio vivo de que cualquiera de nosotros, siendo de la misma naturaleza que Él, es capaz de amar hasta la muerte. Este acto de amor es el que le da sentido a nuestra existencia y es respuesta viva a saber ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos?

Que todo esto es una locura para el hombre de hoy, lo es; pero cada uno de nosotros estamos llamados a amar. Si amar es una locura, El mundo entero está llamado a ser un inmenso centro psiquiátrico.