¿Es posible tener fe en el mundo de hoy?
Les comparto un texto de un amigo argentino (Gabriel Romero) sobre un tema de mucha actualidad.
Si es posible tener fe en el mundo que vivimos, aunque se presente el hombre como un ser secularizado por corrientes ideológicas que plantean una vida sin Dios. La fe es el don que Dios nos regala y como consecuencias damos una respuesta personal a la llamada íntima que Él hace.
Es verdad que se hace difícil hablar de fe cristiana, ya que no se trata de cualquier tipo de fe. Es muy distinto tener fe por algún objetivo o líder, estos son pasajeros, que por una fundamentación con contenido sólido.
Muchas veces tener fe por las convicciones cristianas se torna un desafío, ya que somos tildados de fundamentalista, radicales, conservadores, hasta de anticuados, hasta lo que es peor, perseguidos. Pero creo que en el fondo, esas personas que critican y persiguen nuestra fe, desean tenerla, ya que si por ejemplo usan la palabra fundamentalista, en el fondo reconocen que tenemos un fundamento que sostiene la causa por la que nos comprometemos, anhelan infinitamente ser invitados a poseerla.
El hombre hodierno, busca sus fundamentos en la materia, quiere poseer más, quiere llenar ese vacío, de dar respuestas a ese abismo que no comprende, pero equivocadamente. Y cree que los equivocados somos los que buscamos en nuestra fe lo más preciado por lo que creemos.
Es posible tener fe, miremos ejemplos en el mundo de hoy, mártires, santos, gente que se juega por la causa de Cristo en el siglo veinte, ejemplos, Beata Madre Teresa de Calcuta, amo con locura su fe y la dio a los demás sin miramientos, tratando de que otros también la posean.
La fe ilumina, reconforta, sacia, es un destello del infinito amor que Dios nos tiene, es la antesala del encuentro frontal con Dios, es el sabernos acompañados y dispuestos a saltar en el misterio.
